Kraken de Seattle

Una nueva leyenda ha surgido de las profundidades del estrecho de Puget... los Seattle Kraken, el 32º equipo de la Liga Nacional de Hockey (NHL), son el miembro más reciente de la bulliciosa escena deportiva de Seattle y aportan emoción a raudales en los partidos que juegan en el Climate Pledge Arena. Tanto si es un fan incondicional del hockey como un recién llegado a este deporte, una visita a la casa de los Seattle Kraken promete una experiencia inolvidable. Con 41 partidos de temporada regular que tienen lugar en el Climate Pledge Arena cada temporada (entre octubre y abril), hay montones de oportunidades de disfrutar de una acción trepidante, y aún más oportunidades de ver la acción más emocionante de la ciudad si contamos los partidos de pretemporada (que suelen empezar a mediados de septiembre) y, si cruzamos los dedos, los posibles enfrentamientos de postemporada (la postemporada de la NHL suele durar desde mediados de abril hasta principios de junio).

Asistir a un partido de los Seattle Kraken no es sólo ver la acción sobre el hielo; es una experiencia que lo abarca todo. Desde el momento en que entre en el estadio, será recibido por el zumbido de la emoción previa al partido. Disfrute de la deliciosa cocina local y las bebidas artesanales en las numerosas opciones de comida y bebida del estadio. No deje de visitar la tienda del equipo Kraken, donde encontrará artículos oficiales y recuerdos de su visita.

No solo se puede acceder fácilmente a los partidos de los Kraken desde el transporte público, sino que se fomenta activamente el uso de opciones de transporte público que reduzcan las emisiones de carbono, ya que los fans de los Kraken pueden acceder a pases de transporte público gratuitos incluidos con sus entradas para los partidos en la aplicación para teléfonos inteligentes de los Kraken. Se puede tomar el tren ligero Link desde Seattle Southside hasta la estación de Westlake, y desde allí montar en el monorraíl hasta el Seattle Center, donde se encuentra el Climate Pledge Arena. El monorraíl tiene una grabación especial que suena durante los viajes al Seattle Center los días de partido, y con la multitud llena de aficionados al hockey entusiasmados se crea un ambiente especialmente festivo y divertido.